Cómo será internet sin 'cookies' de terceros? | BBVA

El futuro de Internet pasar por eliminar las cookies de terceros. Este movimiento se debe a la creciente preocupación de los usuarios por mantener la privacidad y afectará los datos que empresas como Google, Facebook, Amazon o Apple recogen sobre el comportamiento de los usuarios en Internet.

Con la eliminación de las cookies de terceros, el SEO se enfrenta a varios retos, ya que no dispondrá de los datos de seguimiento de terceros.

Las empresas utilizan las cookies para una amplia variedad de tareas. Por ejemplo, sirven para mantener los productos en el carrito de compra de un e-commerce, cuando se ha cerrado la página web por error, así como para conservar los datos de inicio de sesión para un sitio web o mostrar contenido recomendado.

El problema es que, cuando una página coloca una cookie en el navegador, también se realiza un seguimiento del usuario por toda Internet, recopilando información sobre los sitios que ha visitado. Es por esto que, cuando se visita una página web sobre camisetas de rock, la publicidad nos persigue y empiezan a aparecer anuncios de camisetas de rock en Facebook, Instagram o YouTube, y también es este el motivo que ha llevado a los usuarios a exigir la eliminación de estos códigos.

En este contexto, la eliminación de las cookies también afectará al SEO. En primer lugar, los profesionales ya no podrán contar con la información de terceros para realizar tareas habituales, como analizar el comportamiento de una campaña de Google Ads o el rendimiento de una estrategia de contenidos en una e-commerce. En su lugar, tendrán que utilizar cookies propias (llamadas «first-party-cookies»), lo que supone que se tendrá que encontrar una nueva forma de obtener la información, pues ya no se podrá «perseguir» al usuario por Internet.

Google ya ha creado un sistema propio, llamado FLoC, que está siendo ampliamente criticado por muchos profesionales y expertos. Desafortunadamente, para las empresas más pequeñas será muy complicado encontrar una forma de recopilar esta información, ya existen muchos desafíos como la precisión, el coste de disponer de una herramienta de estas características o la privacidad.

Para ello, se tendrá que hacer uso de soluciones de personalización en tiempo real, que permitirán capturar información sobre los clientes a través de cómo estos utilizan el sitio web. De esta forma, mediante los datos obtenidos se podrá crear contenido enfocados a sus gustos y necesidades.

Otro cambio que se verá en este futuro sin cookies tiene que ver con el contenido. A falta de datos de navegación de los usuarios, una de las mejores formas de generar visitas, atraer tráfico orgánico y mejorar la visibilidad, será crear contenidos atractivos para el usuario. De esta forma, gran parte de los esfuerzos se deberán centrar en la elaboración de este contenido, que deberá ser capaz de atraer la atención de los usuarios, a través de contenidos relevantes, útiles, interesantes o informativos.

La analítica, sobre todo para profesionales e-commerce y tiendas en línea, será otro quebradero de cabeza. En este sentido, en primer lugar se tendrá que analizar el tráfico propio, para entender la participación y el rendimiento. Además, se tendrán que rastrear las compras fuera de línea, asignando unos indicadores a la experiencia en línea y entender qué papel ha tenido la búsqueda orgánica en la decisión de compra. En resumen, se trata de analizar el usuario que ha consumido un contenido y, a continuación, buscarlo en el punto de compra para saber si accedieron a la tienda después de consumir el contenido o no.

Por otra parte, los usuarios deben saber en todo momento cómo están siendo rastreados. Para ello, las empresas de tecnología están implementando herramientas para ayudar a las marcas a moverse en un futuro sin cookies, al tiempo que se protege la privacidad del consumidor.