1. Palabra clave en el título – el título de tu artículo o tu página web debe contener, al menos, una de tus keywords.

2. Gancho en el título – colocar alguna palabra que enganche a la audiencia, como “mejor, guía, consejos, comprar, cómo se hace, Top10…”. Sé rico en adjetivos y busca sinónimos.

3. Las primeras 150 palabras – Google da más importancia a las primeras 150 palabras de tu texto, así que asegúrate que aparezcan tus keywords y que expliques, en síntesi, exactamente de qué va tu artículo.

4. Links externos – hay que tratar de conseguir links de páginas web externas que direccionen hacia nuestra propia web o blog. Como más importantes sean las páginas que nos linkan, más repercusión tendrán nuestros artículos a ojos de Google.

5. Multimedia – enriquece tus textos con archivos multimedia, ya que hacen el contenido más atractivo para tu lector y aumenta su tiempo de estancia en tu página web.

6. URLs descriptivas y breves – haz que tus URSs sean ricas en contenido: que incorporen al menos una de tus keywords y que tengan entre 3 i 6 palabras (lo menos posible pero que describan el contenido y contengan tu palabra clave).

7. Velocidad de carga – intenta que tu web no tarde más de 3 segundos en cargar, ya que si tarda más, Google reconoce la página como pobre, y no la posiciona tan bien.

8. Social Media – da la oportunidad al usuario de poder compartir tu contenido. Esto no es un factor directo que afecte al SEO de tu web, pero hará que tu página tenga más repercusión y muchas más visitas de usuarios interesados.

9. Imágenes optimizadas – Google también rastrea tus imágenes, por lo que es mejor que las describas -con keywords- en las etiquetas Título y Alt.

10. Metadescripción – Crea un resumen del contenido de tu página web o artículo y asegúrate que aparezca al menos una de tus palabras clave. Esta descripción aparecerá debajo del título de tu página en los buscadores –lo que primero va a ver tu audiencia y lo que hará que decidan si entrar en tu web o no-.