El marketing del futuro será digital - Convierte Más - Agencia de Marketing  Digital

Las empresas se enfrentan continuamente a retos. Quizá la pandemia haya sido uno de los mayores, pero sin duda no el último. Eso sí, la forma de trabajar, tal y como la conocíamos, desaparecerá para siempre. Ahora existen otro tipo de problemas, adaptados al entorno actual. En concreto, en el mundo del marketing digital, nuestros retos han cogido la mano a la tecnología para que actúe como salvavidas en muchas ocasiones, por no decir todas.

De esta forma, las estrategias de marketing digital se empiezan a focalizar en empresas y autónomos para dar vida a su esencia. La estrategia actual no es compatible con el resto de empresas del mismo sector, sino que tiene que ser como los productos que vendemos, personalizados para cada tipo de cliente. Por tanto, una buena estrategia de marketing digital deberá adaptarse a las necesidades, pero para ello habrá que analizarlas previamente.

Es cierto que hay prioridades que nunca cambian, como maximizar las ventas, adaptarse a los presupuestos o incluso tomar la decisión de invertir. Este tipo de acciones se mantendrán a lo largo del tiempo, la diferencia está en cómo los afrontamos, es decir, qué tipo de piedras decidimos evitar en el camino.

¿En qué se basa una buena estrategia de marketing digital?

Actualmente nos encontramos en un escenario adaptativo a los nuevos tiempos, pero no por eso tenemos que esperar a que el viento sople a nuestra favor. Más bien habrá que generar estrategias que acompañen ese proceso para que, una vez se vea la luz al final del túnel, lo hayamos recorrido sin baches.

Las estrategias de marketing se tienen que enfocar en el cliente. El producto ha pasado a un segundo plano y para ello la experiencia es fundamental, pues no vale con vender, sino que el verdadero objetivo está en generar un retorno de cliente, con el que se consiga crear beneficio.

¿Pero de donde viene el tráfico? La web es nuestro instrumento estrella. Debe ser cómoda y fácil de usar si queremos que el usuario permanezca en ella. Necesitamos hacerle la vida más fácil a nuestros clientes, por lo que una web intuitiva es la mejor estrategia para generar este tráfico recurrente. Sin contar con una buena estrategia de SEO para que Google nos valore como prioridad y nos ponga en sus primeras posiciones.

Tras esto merece la pena recordar el poder de la marca. Toda estrategia tiene un producto detrás y ese producto debe tener nombre y apellidos. Poco a poco generamos comunidad a raíz de nuestra marca, pero tenemos que pararnos a pensar en qué tipo de clientes nos enfocamos. Segmentar no es una opción, sino una necesidad para poder establecer una comunicación apropiada que acompañe los valores de la marca.

En resumen, una buena estrategia, además de herramientas que la apoyen, debe tener una visión local y personalizada. Por ese motivo se recomienda que el Marketing cuente con un directorio de empresas locales de diferentes sectores y ciudades, para que el tráfico atraído genere interacción y se convierta así en el objetivo final de toda empresa: las ventas.

Y todo esto se consigue tras el estudio de una situación determinada en el que habremos usado herramientas analíticas generales, mapas de calor y test AB que nos ayudarán a focalizar nuestro producto o servicio y trasladar esos datos al índice de conversión. Acciones específicas para un objetivo común que se hace realidad gracias a los expertos en marketing digital que se encargan de definir los indicadores que más interesa a su cliente.