La llegada de cada año trae nuevos retos y desafíos en el mundo digital. Los avances en esta materia ocurren deprisa y es deber de las empresas adaptarse a ellos para sobrevivir en un mercado plagado de competencia que quiere lo mismo: autoridad, ventas y visibilidad.

No obstante, el 2019 puso el listón más arriba en términos de posicionamiento, por lo que rápidamente los negocios han comenzado a reemplazar sus estrategias por otras para no quedarse atrás y así conquistar los primeros lugares en el buscador más famoso y revolucionario de todos los tiempos: Google.

El e-commerce en números

Los estudios más recientes realizados por Econsultancy afirman que un 22 % de las empresas se encuentra satisfechas con sus tasas de conversión. Esta cifra es especialmente baja -y preocupante- considerando que se espera que el comercio en línea alcance -o supere- los 4,5 trillones de dólares para el año 2021.

Esto también significa que un 78 % de los negocios no está obteniendo el retorno de la inversión estimado -ya sea por un marketing mal enfocado o por su posible inexistencia para los consumidores- lo que permite concluir que solo un pequeño porcentaje de los actores tiene acceso a un mercado multimillonario global, acelerando la extinción o el fracaso de los demás.

Lo que recomiendan los especialistas

Ante un catastrófico escenario que afecta a más de dos tercios de las compañías a nivel mundial, solo queda preguntarse qué es lo que está mal. Evidentemente, hay algo que esas empresas están pasando por alto y según los expertos, probablemente sea el producto de su falta de conocimiento en materia de publicidad y visibilidad.

A fin de cuentas, las PYMES y autónomos no poseen los recursos necesarios para tener una división de ventas, mercadeo y desarrollo web que los mantenga actualizados y a la vanguardia de las últimas tendencias del mercado digital, y es justamente esta falla la que los está llevando a un rotundo fracaso.

Invertir en personal especializado debe ser una prioridad

El posicionamiento de una marca, producto o servicio comprende diferentes aristas que se unen en una sola. Una estrategia de inbound marketing, por ejemplo, necesita ir acompañada de una mayor interacción con la audiencia, pero también de un sistema de ventas más cercano, canales de atención eficientes, un diseño web sin errores y, por supuesto, de SEO.

Y es que de nada serviría crear contenido interesante o tener una interfaz amigable y responsive si nadie puede encontrarla. La optimización de una página depende de múltiples factores y complejos algoritmos, y es por eso que apoyarse en profesionales especializados se convierte en una necesidad.

Los beneficios de contratar a una agencia outsourcing

Google utiliza muchos parámetros para posicionar un sitio web y solo un verdadero experto en posicionamiento los entiende en su totalidad. Contratar a la mejor agencia SEO no es tarea difícil, al menos si se detecta a priori qué es lo que se quiere. Muchas de ellas ofrecen servicios distintos -como diseño, desarrollo web y de aplicaciones móviles, redacción de contenido y manejo de social media- lo que las corona como una herramienta que vale su peso en oro.

Las ventajas de contar con profesionales en todos estos temas son innumerables, pero podrían resumirse en más ventas, ganancias y seguidores. Y aun cuando se piense que el coste de esta decisión es demasiado elevado, no lo es. Las agencias especializadas en SEO tienen un catálogo variado que se ajusta a cualquier bolsillo y, antes de ofrecer sus servicios, efectúan estudios integrales del mercado, de la marca y del nicho de la empresa.

De esta forma, diseñan una atención personalizada y a la medida que se enfoca en el logro de las metas que su clientela espera sin generarle gastos innecesarios y lo mejor, maximizando su capital y sus oportunidades de éxito.