El tiempo pasa por todo y por todos, hasta por las páginas web, las cuales deben ir adaptando el diseño. Tener un diseño de página web atractivo y moderno es importante para atraer visitas. Pero además de ser una página de interés para el público, una debe ser una página web perfecta según tus necesidades, respondiendo a lo que quiere ofrecer.

Para poneros a diseñar o rediseñar nuestra web, lo primero que debemos hacer, es ver como son las páginas de nuestra competencia. El diseño web vendrá después de saber cómo son las webs de los competidores. Una vez lo tenemos claro, lo que buscaremos es ofrecer un diseño mejor, más limpio y más sencillo, para retener al público

Cómo saber cuándo rediseñar una página web

Lo primero es saber seguro que es necesario introducirnos en diseñar de nuevo nuestra web. En caso de que te sientas identificado con alguno de los siguientes tips, es hora de actualizar el diseño:

  • Nuestra web tiene un diseño antiguo, caótico y que dista mucho de los diseños de otras páginas actuales
  • Hicimos nuestra página web con lenguajes de programación que ya no se usan o han quedado desfasados
  • No cuenta con sistema AMP, que permite verla mejor en dispositivos móviles
  • La carga de la página web es extremadamente lenta
  • Tenemos secciones, imágenes u otras zonas de nuestra web que generan errores
  • Cuando la creamos no pensamos en pautas de usabilidad y experiencia de usuario

Los usuarios cuando acceden a la página se marchan enseguida, perdiendo visitas y suscriptores

Cómo abordar el rediseño de nuestra web

Olvídate de cambios menores como son tipografías o colores, la cosa va más allá de estos nimios aspectos. Antes de iniciar el proceso debes sentarte y pensar lo que queremos para nuestra web. Debemos también analizar la estructura de nuestra web, eliminar recursos desfasados y plantearnos instalar nuevos recursos para la web.

El siguiente paso, ya con todas las ideas claras, es empezar a idear un diseño que sea sencillo y útil. Debe estar acorde a las tendencias modernas de diseño, pero siempre buscando la sencillez y evitar que sature. Piensa siempre que debes buscar una buena usabilidad.

Las etapas de diseño son similares a las de creación de una web desde cero. El único gran cambio es que sabemos lo que no funciona y lo que funciona de nuestra web. Como ya tenemos un feedback, sabemos cuáles son nuestras fortalezas y debilidades, potenciando así las fortalezas y corrigiendo las debilidades.

Debemos tener sobre todo en cuenta lo siguiente:

Estructura: Primero que nada debemos tener bien estructurada nuestra página y las secciones que esta tendrá. Son los cimientos sobre los que construiremos nuestra página. En caso que nuestra web ya funcione bien en este punto, no hay muchos cambios que hacer, sino, será más laborioso.

Usabilidad: Necesitas una web bonita, sí, pero sobre todo que sea muy fácil de navegar y de usar. Debemos virar a una web intuitiva, lo más sencilla posible y que le dé al usuario lo que está buscando.

Contenido: Algo que debemos revisar es el contenido de nuestra página web. Revisa los textos y las imágenes, vamos, que los textos estén bien ortográficamente hablando y las imágenes sean ligeras. Piensa bien que contenido se quedara, cual eliminaras y cual actualizaras. Incluso puedes optar por una sección de blog.